Cientos de ciudadanos católicos se dieron cita en la Catedral y fuera de ella para acompañar a la Virgen del Carmen, patrona de la ciudad de La Paz, que hizo el recorrido tradicional, donde el Alcalde fue la cabeza del grupo, destacando de esta manera la procesión. No asistieron autoridades del Gobierno; menos el presidente Evo Morales y el vicepresidente Álvaro García.
Una de las feligreses Inés Montalvo, de 82 años de edad, afirmó que la “procesión de la Virgen del Carmen cada año es más triste, porque antes siempre la acompañaba con bandas y mucha gente que iba siguiendo sus pasos. Ahora se alejan mucho”.
La entrevistada dijo a EL DIARIO que todas las procesiones, donde ella solía asistir eran de columnas interminables de personas.
“Tenían 21 cañonazos, le rendían homenaje a la Virgen. Yo recuerdo cómo venían los de la caballería, porque pasaban en caballos los militares junto a sus jinetes. Ahora solo miran las autoridades y no le dan importancia a ella”, recordó con lágrimas en los ojos mientras encabezaba la procesión que desarrolló ayer junto al alcalde.
Al promediar el medio día, en la Catedral Metropolitana, se celebró una eucaristía católica, donde participó el Alcalde, Luis Revilla junto a algunos personeros del municipio paceño, luego que culminara el desfile cívico – militar.
Mientras que el gobernador del departamento de La Paz, Cesar Cocarico, realizaba una invitación a autoridades nacionales y departamentales a un almuerzo. Mientras que en la iglesia Metropolitana el pueblo paceño católico se reunió para presidir de la solemne celebración.
La imagen de la Virgen del Carmen, patrona de Bolivia y las Fuerzas Armadas, que mide aproximadamente más de un metro y medio, fue expuesta ante cientos de feligreses que se dieron cita para venerarla.
Con cánticos, rezos, Ave Marías y proclamas relacionadas al 16 de Julio, la gente esperó en afueras del templo para sacar en procesión a la “Revolucionaria” que patrocina la Gesta Libertaria del 16 de Julio de 1890.
Mientras que los encargados del Santo Sepulcro sacaban a la imagen al promediar las 12:43. Esta lucía una delicada capa blanca, corona dorada y aromáticas flores en el estrado de sus pies. En brazos sostenía al niño Jesús.
Muchos pedían en oración mejores días para La Paz. “Los paceños no debemos perder la fe, porque es lo único que nos mantiene. Hoy en día la gente se separa mucho de su iglesia”, dijo el feligrés Víctor Torres.
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