Buses, camiones, autos y fieles a pie no paran de llegar durante todo el día al Santuario Nacional de Nuestra Señora de la Concepción Aparecida. Cada año, unos 11 millones de personas vienen a rezar al hogar de la patrona de Brasil, y en ocasiones los visitantes suman más de 200.000. Pero cuando el papa Francisco venga a dar misa a la basílica, el miércoles 24, en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), las expectativas son que se superen todos los récords.
"A todos los brasileños se nos agrandó el corazón cuando se anunció que el papa Francisco vendría a Aparecida. Hay una alegría tremenda en la gente y todo el mundo quiere acompañarlo", afirmó el padre Domingos Sávio, rector del santuario, ubicado a mitad de camino entre Río de Janeiro, donde se celebrará la JMJ del 23 al 28, y San Pablo.
Lamentablemente, por cuestiones de seguridad, el día de la visita papal solo unas 15.000 personas podrán ingresar a la basílica, que es apenas menor que la de San Pedro, en el Vaticano.
El resto de los fieles podrá seguir la misa a través de enormes pantallas que se instalarán en el valle donde se levanta el templo, comandado por el arzobispo Raymundo Damasceno Assis, amigo del papa. Para la comunión habrá un ejército de 400 sacerdotes repartidos por el lugar.
Un ícono del catolicismo
La devoción de los brasileños por Nuestra Señora de la Concepción de Aparecida comenzó en 1717, desde que fue hallada la estatuilla negra de 36 centímetros que se guarda en la basílica. Tres pescadores encontaron la figura en el vecino río Paraíba; primero su cuerpo y luego su cabeza.
Numerosos milagros se le atribuyen, y como el número de peregrinos no para de aumentar, en 1946 se comenzó la construcción del gigantesco santuario de estilo neorrománico que hoy rivaliza en cantidad de visitantes con la basílica de la Virgen de Guadalupe, en México, y con la de Nuestra Señora de Lourdes, en Francia.
"Vengo todos los años; le debo muchas gracias a la Virgen. Tenía muy mal las piernas, ahora puedo venir caminando", dijo Lidia Tosta, de 79 años, que junto con miles de fieles recorre la pasarela que lleva del pueblo de Aparecida al santuario.
Por todos lados se ven familias, ancianos, personas discapacitadas, campesinos y, especialmente en estos días, jóvenes peregrinos que han venido para la JMJ
DETALLES
1 Desde que en 2007 se celebró aquí la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, el santuario se ha vuelto popular entre otros latinoamericanos.
2 Encabezada por el papa Benedicto XVI, la conferencia dio como fruto el Documento de Aparecida, base para una nueva evangelización.
3 La persona que presidió la comisión de redacción del texto fue justamente el entonces arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio, que regresará ahora como sumo pontífice.
4 La devoción de los brasileños por Nuestra Señora de la Concepción de Aparecida comenzó en 1717. Allí se halló la estatuilla negra de 36 centímetros que se guarda en la basílica y que es considerada por la gente como milagrosa.
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