Hubo desorganización en la procesión católica

Un recordatorio de la pasión de Jesús desorganizado y, en alguna medida, deslucido fue lo que se vio ayer en la puerta de la iglesia de La Merced.

Desde el retraso en el inicio del acto —se había anunciado que comenzaría a las 16.30 y lo hizo un cuarto de hora más tarde—, hasta la ausencia de autoridades gubernamentales, ediles y representantes del Cuerpo Diplomático, hicieron que el emotivo acto de evocación tuviera menos boato y brillo en relación con los años anteriores.

PREVIAS. Alrededor de las 16.10, las integrantes de la Renovación Carismática Católica (RCC) Zona Central, cuya sede está en la calle Colón, se afanaban por ultimar detalles. Una de ellas incluso ponía pétalos de gladiolos en una charola, pero nunca se vio en qué momento las usó.

El tráfico vehicular alrededor del trayecto estaba cortado. Virginia Cordero, de RCC, tuvo que solicitar que la dejen acceder con su silla de ruedas con motor a los policías que acordonaban el acceso al templo de La Merced.

Entretanto, una vendedora aprovechaba las circunstancias para ofertar láminas de la vida y pasión de Cristo, historia de la Semana Santa y otras, a dos bolivianos.

Colegios como el San Calixto, Santísima Trinidad y las bandas del Pantaleón Dalence, Don Bosco —autóctona y tradicional— esperaban que alguien les dijera dónde acomodarse.

SE INICIA EL RECORRIDO. Mientras una adolescente mostraba el look de temporada (botas negras, pantalón ceñido, blusa de cuello ancho morada, chamarra de jean negra y los infaltables lentes polarizados), las damas de RCC se apretujaban.

“Estamos en bulto. Nos tenemos que acomodar de a cuatro por fila y no de a seis”, les indicaba inútilmente un varón.

A las 16.45, la Juventud Mercedaria antecedió el paso de la primera imagen: Jesús ante Pilatos. Desde el público, una señora reclama: “No participa el Presidente, ni siquiera la banda policial. Da la impresión de que no fuéramos católicos”.

Durante la ceremonia se mencionó que una de las imágenes había vertido lágrimas.

“Un Estado laico no se compromete con la religión”

ANF. El Gobierno seguirá ausente de las ceremonias de Semana Santa porque el Estado es laico y el Gobierno, respetuoso de las creencias y religiones, dijo ayer el vicepresidente Álvaro García al salir del Palacio Quemado. Para García Linera, “los cristianos, los católicos debemos y deben recoger esa enseñanza (de Jesús): todo por los demás, nada para uno”.

“Es lo que nos dice Cristo el día de hoy. El sacrificio por los demás tiene sus resultados”, aseguró la autoridad acerca de un Estado laico.

“Un Estado laico significa que es un Estado profundamente respetuoso de todas las religiones”, aseguró el Vicepresidente al sostener que “el Estado no se compromete con ninguna religión en particular, justamente por ese respeto”.

Para destacar

El obispo Edmundo Abastoflor participó ayer en la procesión del Santo Sepulcro.

Luis Revilla, alcalde de la ciudad, estaba de cumpleaños, según su perfil de Facebook.

Las bandas de los colegios Pantaleón Dalence y Don Bosco acompañaron el recorrido.

Temas como Adiós a mi comandante, Marcha de muertos y Ven Jesús mi Salvador se interpretaron.