El actual presidente de la Iglesia Metodista Pentecostal, la principal congregación evangélica de Chile, con más de 2 millones de fieles, el obispo Roberto López Rojas, fue agente de organismos represivos y de espionaje durante la dictadura de Augusto Pinochet.
Así lo pudo confirmar Efe a través de documentos de la Marina a los que tuvo acceso y en una entrevista con el obispo, quien aseguró que no estuvo involucrado en "ningún crimen", pero dijo sentirse "honrado" de haber cumplido las funciones que se le asignaron como suboficial de la institución naval.
López, quien dirige esa iglesia con más de un siglo de presencia en Chile, integró la Central Nacional de Informaciones (CNI), sucesora de la DINA como policía secreta de Pinochet.
Me da asco saber que una persona que se dice obispo esté involucrando con tanto cosa podrida.
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