Los festejos incluyen una serenata que será mañana a las 19:30, y comenzará con la Solemne Salve en el templo San Isidro de Villa Rivero y a las 20:00 se realiza la “víspera con exhibición de juegos pirotécnicos” en la plaza Gualberto Villarroel.
Según estudios recopilados por el historiador René Vargas Velarde, está celebración se remonta a los años 40 del siglo pasado.
“Según versiones de investigadores mueleños (habitantes de Muela, hoy Villa Rivero), en la década del 40, ante la noticia de la aparición de la imagen de una virgen, a dos niñas que pasteaban sus ovejitas en el cerro K’ili K’ili (halcón en aimara), se produjo una inusitada romería de propios y extraños al pueblo de Villa Rivero, cuyo nombre anterior era Muela. Una de las pastorcitas Natividad Goitia Rojas (Nativa) Taraña, es decir, que tiene seis dedos en cada pie, y la otra de nombre Leonor Paz Soldán Mercado (Leo), quienes mal tratadas por sus padres, al subir a la cumbre de la colina encontraban tranquilidad y un poco de solaz esparcimiento olvidando sus preocupaciones”, encontrándose en una de esas oportunidades con una misteriosa señora vestida con “aqsu” (vestimenta andina), que se les acercó, pidiéndoles agua para saciar su sed.
Según la investigación de Vargas Velarde: “Al retornar a sus viviendas comentaron lo ocurrido a sus padres y a los vecinos, ellos incrédulos y con mucha curiosidad dieron a conocer al párroco de Villa Rivero, para entonces René Panoso Lara, joven misionero hijo de este pueblo, y su primera experiencia que recibió la unción sacerdotal el lº de junio de 1941. La gente alborotada guiada por las niñas pastorcitas llegaron hasta el lugar donde apareció la ‘lary mamita’, más no la encontraron, pero sí la referida piedra, desprendiéndola no vertió agua como habían anunciado; no obstante se sorprendieron al encontrar la imagen de la Virgen tallada en dicha piedra”.
En el cerro de K’ili K’ili
“La noticia de la leyenda --refiere René Vargas Velarde-- fue cobrando cada vez mayor fuerza, como un reguero de pólvora, promoviendo la llegada de muchos peregrinos de diferentes pueblos del Valle Alto. Algunos comentaban haber visto una mujer resplandeciente paseando en la accidentada geografía del cerro, por lo que se dieron la tarea de cuidar y venerar dicha imagen en campamentos improvisados por varios años, haciendo guardia por turno. El Padre Panoso maravillado por este acontecimiento deslumbrante, informó al Obispo Bertoldo Burel, quien interrogó a las niñas de lo que vieron y experimentaron. Asombrado por lo ocurrido autorizó la construcción de una Capilla en la parte más alta del cerro de ‘K’ili K’ili’”.
Los festejos de este fin de semana se extenderán al sábado 5 de septiembre, desde las 9:00 con una Romería con la imagen de la Virgen de Surumi a la capilla del cerro K’ili K’ili, acompañada de autoridades, devotos y pueblo en general y el domingo sigue la fiesta una misa en el lugar de la aparición
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