“Es una alegría que sea un latinoamericano y es una gracia para la Iglesia, en este momento participar de la historia, porque es el primer papa del nuevo mundo, el primer papa latinoamericano. Es una señal de que el Espíritu Santo está soplando hacia América”, dijo Erwin Bazán, vocero del Arzobispado de Santa Cruz.
Y como el nombramiento causó alegría, será motivo de fiesta. Mañana a las 19:30 habrá una eucaristía celebrada por el arzobispo coadjutor de Santa Cruz, Sergio Gualberti y los obispos de la diócesis. Luego, los sacerdotes saldrán al atrio de la catedral metropolitana para seguir el festejo con el resto del pueblo cristiano.
Primera visita
Si en la catedral de Buenos Aires ya se desató una gran celebración, será Brasil el primer país que reciba al nuevo papa, que participará de la Jornada Mundial de la Juventud, a celebrarse en julio, en Río de Janeiro. Tal vez por eso los brasileños fueron los primeros en pronunciarse. Se confesaron felices y esperanzados en que Bergoglio llevará a su pontificado "la rica experiencia de la Iglesia latinoamericana".
Ricardo Ezzati, arzobispo de Santiago de Chile, la elección del argentino es una muestra de la madurez de la iglesia de la región. Menos feliz fue Cristina Fernández, presidenta de Argentina. De forma lacónica dijo: "En mi nombre, en el del Gobierno argentino y en representación del pueblo de nuestro país, quiero saludarle y expresarle mis felicitaciones".
En las redes sociales, el nuevo pontífice ya fue bautizado como el papa Pancho, algunos hicieron paralelismos con el fútbol y dijeron que Argentina ya tiene a D10s (por Diego Maradona), al Messías (Por Lionel Messi) y ahora también al papa. Por cierto, Bergoglio es un enfermo por el fútbol. Es un ‘cuervo’, un hincha de San Lorenzo de Almagro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario