Al menos 43 personas perdieron la vida en los violentos enfrentamientos entre budistas y musulmanes que estallaron hace diez días en Birmania, según datos de la prensa estatal.
Unas 1.300 viviendas y otros edificios fueron incendiados, lo que ha dejado a 11.376 personas sin techo, informó hoy el periódico New Light of Myanmar.
Un total de 68 personas fueron arrestadas en 15 comunidades. La violencia comenzó el 20 de marzo en Meiktila, ciudad ubicada en el centro del país, luego de una riña entre un comerciante musulmán y su cliente.
Tras eso la violencia contra los musulmanes se tornó imparable e incluso varias mezquitas fueron atacadas. La situación está volviendo a la calma.
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