Feligreses acompañaron a la Virgen María recordando el Vía Matris, o más conocida como el camino de la madre dolorosa en la misa celebrada ayer en el Santuario del Socavón a horas 19:00, orando y reflexionando sobre lo que vivió la madre de Jesús.
En la misa presidida por el rector del Santuario del Socavón el padre Bernardino Zanella, se explicó a la congregación de la fragilidad de la humanidad y pidió para que Dios perdone los pecados cometidos.
Así también, recordó a la comunidad a través de la oración que Jesús era hijo, único y apoyo con que contaba María. Un día ella fue elegida para llevar en su vientre al Redentor, para luego verlo encerrado en el sepulcro.
Lo mataron cruelmente, no pudo cerrarle los ojos y darle la bendición de madre al morir, ni rezar con él algunas oraciones, sólo sufrió en la cruz de su hijo, esperándolo para limpiar su cuerpo.
Zanella explicó que Jesús eligió entregar su vida para salvar a la humanidad de los pecados cometidos.
Todo el dolor que vivió la Virgen María, se fue recordando en la misa de ayer frente a la imagen de la Dolorosa, vestida de negro cabizbaja por el sufrimiento que le causaron.
El templo se encontraba a media luz, y las butacas acomodadas frente a la imagen de la Dolorosa, donde se dio lectura a la liturgia del evangelio, en esta ocasión fueron muchos los llamados, pero pocos los asistentes a escuchar la misa, en honor de la Virgen María.
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