Más de 100 sacerdotes del país, reunidos desde ayer en Cochabamba en la XXVII Asamblea Anual del Clero Diocesano Nacional, analizarán como parte de la agenda de este encuentro, los temas de la coyuntura nacional, el caso del proyecto de Ley de Seguridad Ciudadana, el conflicto de los indígenas del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis), los derechos humanos, la migración y la familia, entre algunos.
La Asamblea se inició ayer con varios saludos, entre ellos del presidente de la Conferencia Episcopal de Bolivia, el cardenal Julio Terrazas, del arzobispo de Cochabamba, monseñor Tito Solari, y del presidente del Clero Nacional Pedro Cruz, quien inauguró el encuentro.
"La Iglesia es lo que son sus sacerdotes y eso se lo irá percibiendo no como una constatación cualquiera, sino como un llamado para que el sacerdocio no sea una rutina, sino palabras de vida", expresó el cardenal en su saludo a los presbíteros de las 18 jurisdicciones eclesiales.
Sobre los compromisos sacerdotales dijo que es necesario asumirlos de una manera que no sean coyunturales o pasajeros, por lo que pidió a los sacerdotes congregados llevar esta consecuencia como fruto de vida que pueda impulsar a otros hermanos sacerdotes y la vida de la Iglesia en Bolivia.
La reunión de sacerdotes concluirá mañana con la aprobación de una carta dirigida a la población boliviana que se denomina “Sacerdote, ministro de la fe”.
El presidente del Consejo de Bolivia del Clero Diocesano informó que ayer la Asamblea abordó temas relacionados a la formación del clero, entre ellos cómo “fortalecer nuestros votos de este compromiso presbiteral y así servir con más fuerza al pueblo de Dios”.
La temática de la Asamblea pretende ir en sintonía con la inquietud, la dinámica y los desafíos que la Iglesia plantea en este tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario