El párroco Vitaliano Calcina fue aún más allá y advirtió que “la torre y la cúpula están en peligro. Con una fuerte lluvia pueden colapsar y derrumbarse en cualquier momento”.
El sacerdote explicó que a pesar de que el templo ubicado frente a la plaza Alonso de Mendoza fue declarado Monumento Nacional en 1930, no recibe apoyo “de ninguna entidad pública” para su conservación.
“La Alcaldía debería proteger este bien patrimonial, pero dice que no es su tuición y que no les corresponde”, dijo el religioso que custodia la parroquia hace más de diez años.
“Tengo temor que ocurra otro derrumbe como en el 2005. Esa vez también advertimos que estaba en riesgo la cúpula y no hubo respuesta”, agregó Calcina, quien no se cansa y sigue gestionando atención.
La construcción de San Sebastián se inició en 1548. Luego, en 1552, se inauguraron las obras de ampliación a templo mayor y así fue entregado en 1559. En sus primeros años dependía del Virreinato del Cusco, pero luego pasó a al Obispado de Charcas hasta 1607, año de creación de la Diócesis de la ciudad de La Paz.
Más daños
El 13 de diciembre de 2005, la cúpula central cedió al remojo y otros daños atribuidos a la antigüedad y la falta de mantenimiento, y cayó.
En esa ocasión el municipio restauró esa parte del inmueble, sin embargo, ya pasaron más de seis años y no hubo ningún otro trabajo, según afirma el sacristán Alfredo Flores. “Hay goteras y humedad que ponen otra vez en riesgo la cúpula”, indicó.
Pero ésta no es la única parte afectada. En el interior del templo se observa que la pintura de varias paredes están descascaradas y presentan rajaduras.
Según Flores, la última vez que arreglaron la fachada fue hace más de diez años. A simple vista, el frontis de la iglesia ya perdió el color original y en algunas partes la masilla de estuco del revestimiento se cae a pedazos.
“El campanario no funciona desde hace seis años. Las paredes de la torre están en riesgo por la humedad. Cuando llueve, el agua se acumula y remoja las paredes”, explicó Flores, para quien uno de los principales problemas se origina en una construcción que uno de los vecinos culminó no hace mucho y que colinda con la torre.
Pero ahí no acaban los contratiempos. Germán Reyes, representante del Consejo de Feligreses de San Sebastián, contó que otro de los vecinos, ubicado al lado derecho del inmueble, “removió los contrafuertes del templo y eso puso en riesgo los cimientos”. “No es posible que las autoridades no hagan nada al respecto”, agregó.
Reyes indicó que junto a varios devotos y vecinos hacen gestiones para conseguir recursos y financiar la restauración del templo, “pero nadie quiere hacerse cargo porque como es patrimonio nacional, es el Estado el que debe responsabilizarse por la refacción y conservación”.
Consultados por Página Siete, funcionarios del Ministerio de Culturas señalaron que es el municipio paceño el que debe cuidar la infraestructura. Pese a la insistencia, encargados de la Dirección de Patrimonio de la Alcaldía no quisieron opinionar sobre el tema y prometieron una “respuesta escrita” para los siguientes días.
“ Esta es la primera iglesia parroquial de La Paz y tiene un gran valor patrimonial para el país ”.
Vitaliano Calcina
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