El médico de cabecera del cardenal Julio Terrazas, Herland Vaca Díez, informó ayer que la posibilidad de una mejoría en el estado de salud del líder religioso es “remota” y que el cuadro se agrava con el pasar de las horas.
“Está prácticamente dormido. Yo diría que la situación del Cardenal es grave y que la tendencia va a ser a la agravación progresiva, ¿en cuanto tiempo?, no sé. Y en cuanto a que tenga una mejoría de este cuadro los médicos lo vemos muy remoto”, sostuvo el galeno.
Vaca Díez señaló que el estado de salud del Cardenal es crítico e indicó que volvió a ser conectado a un respirador artificial ya que los pulmones se encuentran seriamente comprometidos.
Por su parte, el vocero de la autoridad eclesial, Edwin Bazán, manifestó que persiste la infección en las vías respiratorias del Cardenal y que recibe oxígeno para que no bajen los niveles de saturación en sangre. “Está bastante delicado, demacrado, no hay indicadores en términos médicos que permitan alentar a esa recuperación”, comentó.
Bazán dijo que el Cardenal no quiere ser internado por lo que se ha conformado una junta médica para que los cuidados hospitalarios puedan ser brindados en su domicilio. El vocero pidió a la población seguir “en oración para que se cumpla en el Cardenal la voluntad de Dios”.
Julio Terrazas nació el 7 de marzo de 1936 en Vallegrande, Santa Cruz, donde realizó sus estudios básicos y primarios hasta que ingresó en el seminario de la Congregación del Santísimo Redentor en Chile. Tras una larga carrera sacerdotal, el papa Juan Pablo II lo elevó al rango de Cardenal Sacerdote en 2001, convirtiéndose en el primer cardenal nacido en Bolivia. Fue uno de los electores en el Cónclave de 2013 que dio comienzo a la era del Papa Francisco. (ANF)
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