El papa Francisco convocó ayer a los países que firmaron el acuerdo climático de Paris a que se unan para un compromiso consensuado y ponerlo en práctica de manera urgente, y que además prestarán atención a "los más vulnerables" y más afectados por este fenómeno.
"Ponerlo en práctica necesitará un compromiso consensuado y una dedicación generosa por parte de todos", dijo a decenas de miles de personas en la Plaza de San Pedro. "Exhorto a la toda la comunidad internacional a seguir adelante de forma urgente en el camino que ha sido tomado, en una señal de solidaridad.
Francisco, que en mayo publicó una encíclica sobre la necesidad de proteger el medio ambiente y detener el calentamiento global, dijo, además, que esperaba que se garantice una especial atención "a los pueblos más vulnerables".
Los países reunidos durante dos semanas a las afueras de París, acordaron el sábado limitar el aumento de la temperatura del planeta "muy por debajo de dos grados centígrados con respecto a los niveles preindustriales" para limitar las consecuencias catastróficas del calentamiento global.
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