La celebración de la festividad de Corpus Christi, significa la unión de todos los cristianos porque comen y beben el cuerpo y sangre de Cristo que dio su vida por la humanidad para salvarla del pecado y para que cada persona obtenga la vida eterna.
Es de esta manera que el obispo de la Diócesis de Oruro, Monseñor Cristóbal Bialasik resumió la importancia de este día donde se recuerda la consagración de la eucaristía que representa el cuerpo y sangre de Cristo instituida en la última cena en la que compartió con sus discípulos y personas que fueron la base para constituir la iglesia católica.
En la homilía también se recordó la multiplicación de 5 panes y 2 pescados en cientos; tras la oración que brindó a su padre elevando la vista al cielo y orando antes sobre estos alimentos que fueron distribuidos a grupos de cien personas.
"La eucaristía es el banquete del Señor, es la cena, es la fracción del pan, es la asamblea eucarística y la presencia concreta y viva de Cristo", manifestó.
Monseñor Bialasik, instó a las personas a asistir los domingos a la misa por ser el día del Señor, para alimentarse de su cuerpo y de su sangre al ser partícipes de la eucaristía, fuente de vida y centro de espiritualidad, además de ser un símbolo de unidad porque se comparte la presencia y vida de Jesús, motivo por el que la misa debe celebrarse en comunidad.
"La misa del día del Señor es lo principal, porque allí Jesús da la vida por nosotros, porque el que come y bebe de su cuerpo y sangre tiene vida eterna porque a pesar de que se presenten sufrimientos en nuestra vida, el amor de Dios es infinito y se encuentra con cada uno de nosotros", dijo el obispo.
Ante el ataque que sufren actualmente los sacerdotes, dijo que la Eucaristía no es un invento de ellos, reiteró que fue instituida por Jesús en la Última Cena, celebración que se realiza el Jueves Santo y que se recuerda también en Corpus Christi.
"Tenemos que participar con profunda fe en las misas, porque en este mundo se corre el peligro de olvidarse de ella, porque Cristo continúa entregando su vida por nosotros y por eso se debe participar en la misa hasta la llegada del Señor, el último día del mundo", manifestó.
Dijo que en la fiesta de Corpus Christi, la iglesia sale en procesión solemne llevando a Cristo presente en la eucaristía, anunciando de esta manera que el sacrificio del Señor es para salvar al mundo entero, y algunas instancias promueven para que se siga participando en ritos y otras celebraciones las cuales ya fueron vencidas por la única celebración verdadera donde Cristo se brinda para la salvación de la humanidad.
Al concluir la homilía, Monseñor Bialasik, recordó que la presencia de los sacerdotes es importante porque sin ellos no habría iglesia, algo que se olvido en los últimos días cuando se escuchó a la gente en Copacabana insultar a diario a los sacerdotes, algo muy doloroso que se vio a través de los medios de comunicación.
Posteriormente se realizó la procesión por varias calles de la ciudad, donde se expuso el santo sacramento, demostrando la fe de la comunidad católica
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