El arzobispo de Cochabamba, monseñor Tito Solari, informó que la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) recibirá en abril de 2015 un informe de la comisión de obispos que indaga el suceso.
En 2011, la CEB conformó una comisión para analizar el caso del Cristo que Llora. El grupo está conformado por el arzobispo de Cochabamba, monseñor Tito Solari; el obispo de la diócesis de Oruro, monseñor Cristóbal Bialasik; y el obispo de la Prelatura de Aiquile, monseñor Jorge Herbas. La comisión presentará su informe a la Asamblea de la CEB y a Roma.
“La pregunta fundamental es: Si, los obispos lo reconocemos como milagro. Es decir, como presencia extraordinaria del Señor, en medio de nuestra iglesia de Cochabamba. No es una respuesta fácil. Tenemos un documento prácticamente concluido; ahora haremos un voto resolutivo entre los tres y lo presentaremos a la CEB.”, dijo Solari.
Los estudios realizados por el científico boliviano, Ricardo Castañón, sobre la imagen del Cristo que Llora o Limpias han establecido que las lágrimas de sangre que emanan de la imagen contiene tejido humano.
Uno de los estudios da cuenta de que las lágrimas están compuestas de tejido humano, sin embargo, nunca se pudo determinar el tipo de sangre, ni ADN. En tanto que los exámenes de radiografía computarizada han descartado que se trate de un fraude.
Una vez que el informe de los obispos sea entregado a la CEB, es posible, que se requieran estudios complementarios antes de que se tome una decisión definitiva sobre la declaratoria.
En los últimos tres meses se han recibido documentos históricos del Arzobispado y testimonios de sacerdotes y de personas presentes durante las emanaciones de lágrimas. Entre los relatos se incluye el de una persona que asegura haber sido sanada de un problema en la vista luego de orar frente a la imagen. Las investigaciones finalizaron hace un mes y ya fueron entregadas a los obispos de la comisión de la CEB.
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