En gratitud al Tata Lagunas Miles de devotos visitaron Cala Cala recordando los 100 años del Santuario

En gratitud por los milagros del Tata Lagunas, miles de devotos desde el 14 de septiembre visitan Cala Cala, recordando los 100 años del Santuario, muchos fieles peregrinaron desde el centro de la ciudad.

Esta fiesta atrae a miles de personas, no sólo del departamento sino del resto del país quienes llegan para agradecer los milagros atribuidos al Cristo Crucificado.

Los lugareños, cargados de aguayos multicolores y cubiertos con ponchos interpretando tonadas con zampoñas y bombos, agradecieron a Dios con sus canciones.

El párroco del Santuario de Cala Cala, Jaime Encinas, manifestó que se recuerda el centenario de esta parroquia y los feligreses visitan este templo para agradecerle por todas las peticiones que se les fueron concebidas.

"Estas personas son muy devotas y en todas estas semanas vimos que estuvieron apoyando en todo como el pintado de la iglesia, además del remodelado que se hizo para que este centenario pueda llevarse adelante de buena manera", aseguró.

HISTORIA

La historia cuenta que dos niños pastores provenientes de la población de Cala Cala, llevaron sus ovejas al lugar donde se encuentra el calvario y ese día cayó una granizada con fuertes relámpagos, pasada la inclemencia del tiempo, los menores quedaron sorprendidos al observar un objeto brillante en el lugar más elevado del cerro donde vieron una Cruz que llevaba el rostro de Cristo.

Este hecho fue comunicado a sus padres y estos a su vez al hacendado del lugar, Isaac Arrázola Valenzuela, a quien la deidad se le manifestó en sueños y le pidió que construya una casa en el lugar donde fue encontrada la cruz.

Ante la petición, Isaac Arrázola hizo construir una pequeña capilla de adobe y techo de paja, pero a la vez había un fraile en el lugar que no creía en esa manifestación y fue al lugar de la aparición de la cruz para convencerse de este hecho, al llegar al pie del cerro fue encantado o como todos sostienen fue convertido en roca por su falta de fe.

Actualmente se divisa en este lugar una mancha de color negro en el cerro, se cree es la capucha y hábito de este personaje, lugar de donde brota una vertiente de agua, considerada como milagrosa y que es distribuida a toda la ciudad; es de esta forma que inicia la devoción por el Señor de Lagunas o Tata Lagunas.