La Hermandad Santo Sepulcro está próxima a cumplir 40 años de vida al servicio de este ícono de la iglesia católica en Santa Cruz, que es el centro de atención durante las fiestas de Semana Santa. Salustino Carrasco, quien por ahora preside esta organización, tiene 70 años de edad y 35 ha dedicado a cuidar este santuario. En estas fechas pulen, enceran y visten a las imágenes, además de poner el hombro durante muchas cuadras durante el viacrucis en el Casco Viejo de la capital cruceña.
Motivados por la devoción. El Santo Sepulcro es el féretro que contiene el cuerpo de Jesús ya sin vida y que es venerado en la Semana Santa. Se trata de una urna construida de madera que en abril de 1975 llegó a Bolivia desde España, donde fue elaborada por un afamado artesano de figuras sacras. "Recuerdo que monseñor Carlitos Gericke fue el encargado de gestionar los fondos para que se construya este Santo Sepulcro. Aunque no conozco a detalle su costo, sé que para la época fue mucho dinero el que se debió juntar entre todas las personas que ayudaron, entre ellos los pioneros de la hermandad Santo Sepulcro".
Historias relacionadas a la figura de Jesús. Salustino recuerda que la obra de arte sacro llegó en piezas a la ciudad de La Paz, donde fue incautada por las autoridades, pensando que se trataba de algún tipo de contrabando de madera. Se recuperaron las piezas y fueron enviadas a Cochabamba, donde un conocido carpintero se encargó de ensamblar el sepulcro y su base, todas las piezas finamente talladas y con detalles hechos en plata. La imagen del hijo de Dios está esculpida en una sola pieza de madera sobre el lecho donde está recostado.
Luego de pasar algunos meses en la Llajta, la urna y la figura estaban listas para ser llevadas a su destino final, el salón que está ubicado en el ala oeste de la Basílica Menor de San Lorenzo, frente al Museo Catedralicio.
"Recuerdo que se contrató un avión para traerlo y se necesitaban manos para que llegue hasta la catedral, fue ahí que se decide fundar esta hermandad", recuerda. "Desde entonces todos los años nos encargamos de hacer el mantenimiento del cuerpo de Jesús, la Virgen María y San José, además de otros santos que hay en la catedral", explica Salustino, que a sus 70 años de edad ya aqueja dolores y esto le preocupa porque dice necesitar de personas devotas que "quieran de corazón continuar con este trabajo".
Trabajan acatando las órdenes de los obispos. El padre Hugo Ara, quien es el rector de la Catedral, destaca el trabajo de Salustino y las 35 personas que de manera desinteresada cuidan de estas figuras. "Sin lugar a dudas su trabajo es importante, porque ellos cuidan de la platería del Santo Sepulcro, especialmente durante la Semana Santa, siempre respetando las directrices que nos dan nuestros obispos".
Padrinos de la santa figura. Ara menciona que todos los años se aproximan personas que buscan apadrinar las ropas de Jesús, la Virgen María y San José. "La hermandad se encarga de organizar esta ayuda y del mantenimiento de todos los santos". La figura de Jesús ya cuenta con el tul que lo cubrirá durante la procesión.
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