San Severino, el soldado romano, congrega a centenas de devotos

La imagen del soldado romano, santo de las lluvias y patrono de Tarata, San Severino, congregó a centenas de devotos, ayer en el día de fiesta.

Una pintura en la capilla de velas, una imagen recostada en una urna y otra más pequeña de pie son las representaciones de San Severino, un soldado del siglo II o III que fue martirizado por su fe y cuya festividad se desarrolló en su día principal, ayer.

La procesión se hizo con acompañamiento de miembros del Ejército y banda. Por detrás, los bailarines cumplieron con el segundo día de danza.

Una lluvia antecedió a la jornada y los creyentes la asociaron al santo “porque es quien intercede para que llueva”.

Edwin Paredes llegó ayer desde Cochabamba hasta el templo de Tarata, ubicado al lado del convento. Dijo que cada año va para agradecer por su salud, trabajo y la producción en los campos.

“Tengo mucha fe, soy católico. San Severino con la lluvia hace que se produzcan los alimentos y tengamos todo. Nos da abundancia porque la alimentación es el contacto de la lluvia con la tierra”, explicó mientras aguardaba la misa central en el templo.

María Luisa Delgadillo aseguró que los favores que se piden con fe a esta imagen son concedidos.

“Este año está lloviendo poco. La petición de los fieles es con fe y él es un señor muy milagroso. También le pedimos salud y bienestar”.

Desde Quillacollo, Roberto Mejía fue a agradecer por un pedido cumplido. “El año pasado le pedí que se construyera mi casa y se ha cumplido”, contó.

Las flores en baldes, en su mayoría gladíolos, colmaron la parte principal del templo.

La distancia

29

Tarata está situada a 29 kilómetros de la ciudad de Cochabamba. El último fin de semana de noviembre se llena de visitantes por las jornadas de la festividad de su patrono San Severino. La ocasión es propicia también para el comercio. Destacan la comida y la alfarería, además de la visita a lugares turísticos.