Ciudad del Vaticano.
El cardenal Tarsicio Bertone, ex secretario de Estado del Vaticano, denunció ayer las "calumnias" contenidas en dos libros con documentos secretos de la Santa Sede en relación con diversos gastos que se le atribuyen.
"Es una vergüenza, no sé cómo defenderme", declaró el cardenal en relación con los datos publicados sobre el coste de renovación del apartamento en el que reside. La residencia de Bertone, datos de cuyo coste y dimensiones ya fueron objeto de polémica hace unos meses, fue reformada con un coste de 300 mil euros que el cardenal asegura pagó de su bolsillo.
"En cuanto al apartamento que me fue asignado de acuerdo con el papa Francisco y los superiores del Governatorato, se me comunicó que ese año no había dinero en el presupuesto para la reestructuración y que debería sufragar los gastos", explica Bertone.
"Pagué con mis ahorros por un apartamento que no es de mi propiedad y que quedará en el Governatorato", alega el ex secretario de Estado.
"No vivo en el lujo", responde Bertone al ser preguntado por cómo se compara con el papa, que reside en un apartamento de 50 metros cuadrados en la Casa Santa Marta, dentro del Vaticano.
Según el cardenal, el apartamento en el que él reside mide 296 metros cuadrados y no los quinientos o más que se mencionan en los libros "Vía Crucis", de Gianluigi Nuzzi, y "Avarizia", de Emiliano Fittipaldi, que salieron ayer a la venta y que presentan documentos secretos del Vaticano. También asegura desconocer que haya facturas relacionadas con la Fundación Niño Jesús.
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