El papa Benedicto señala en la segunda parte de su libro titulado Jesús de Nazaret, que Jesús no fue un “revolucionario político” y que su mensaje y su comportamiento no constituyeron un peligro para el dominio romano.
Asimismo, exoneró a los judíos de ser los culpables de que Jesús fuera condenado a muerte. En el libro, del que ayer El Vaticano adelantó algunos capítulos, el pontífice señala que, cuando en el Evangelio de Mateo se habla de que “todo el pueblo” pidió la crucifixión de Cristo, “no se expresa un hecho histórico”.
“¿Cómo habría podido todo el pueblo judío estar presente en ese momento para pedir la muerte de Jesús?” se pregunta el papa, quien reconoce que esa errónea interpretación ha tenido “fatales” consecuencias, en referencia a las continuas acusaciones de deicidio a los judíos durante siglos, que propició su persecución sistemática.
Barrabás, el culpable
Benedicto agrega que la “realidad histórica” aparece más correcta en los evangelios de Juan y Marcos.
“Según Juan, fueron simplemente los judíos, pero esa expresión no indica para nada que se tratase del pueblo de Israel como tal y menos que tuviera un carácter racista”.
“Juan era israelita, como Jesús y todos los suyos. En Juan esa expresión tiene un significado preciso y rigurosamente limitado, se refiere a la aristocracia del templo de Jerusalén”, escribe el papa Ratzinger.
Añade que Marcos amplía el cerco de los acusadores a los ochlos, la masa que apoyaba a Barrabás y que se había movilizado para lograr que fuera amnistiado con motivo de la inminente pascua.
“El verdadero grupo de los acusadores son los círculos contemporáneos del templo y la masa que apoyaba a Barrabás”, precisa, de manera categórica.
El Concilio Vaticano II (1962-1965), que lanzó a la Iglesia hacia el siglo XXI, promulgó la declaración “Nostra Aetate”, con la que los católicos retiraron las acusaciones de deicidio contra los judíos.
Benedicto indica que sobre la fecha de la Última Cena los evangelios sinópticos (Marcos, Lucas y Mateo) están equivocados y lleva razón Juan, ya que en el momento del proceso a Jesús las autoridades no habían celebrado la pascua y debían mantenerse puras.
Afirma que la Última Cena no fue una cena pascual según el ritual judío y que Cristo fue crucificado no el día de la fiesta judía, sino en la vigilia.
La segunda parte del libro Jesús de Nazaret será presentada el próximo 10 de marzo en el Vaticano y está dedicada a la pasión, muerte y resurrección de Cristo, los momentos más decisivos en la vida de Jesús.
Detalles del libro
# Judas El papa también analiza la figura de Judas Iscariote, cuyo nombre es sinónimo de “traición”: “Su arrepentimiento se vuelve desesperación. Sólo se ve a sí mismo y sus tinieblas, no ve más la luz de Jesús. Su arrepentimiento es destructivo, no verdadero”, afirma Benedicto.
# Reino En el libro también se refiere al Reino de Dios y asegura que sólo la verdad puede llevar a la liberación del ser humano y que las grandes dictaduras únicamente viven gracias a la “mentira ideológica”, un asunto en boga estos días.
No hay comentarios:
Publicar un comentario