El juez José Pedro Carvalho dispuso el arresto domiciliario, con derecho a trabajo, para el sacerdote Miguel Vargas Velasco, acusado de corrupción de niños y acoso sexual en la ciudad de Trinidad, Beni.
“Hemos presentado pruebas documentales que son fehacientes de que esto se debe a una confusión y a raíz de una mentira de la misma menor. Prueba de ello es que existe un retiro de la denuncia”, afirmó el abogado defensor del religioso, Joaquín Pessoa.
La audiencia se instaló desde las 11.00 de la mañana y concluyó pasadas las 22.00 horas del sábado.
El sacerdote fue aprehendido el viernes en la noche después de un allanamiento en su domicilio, en predios de la parroquia de Pompeya, donde la Policía y la fiscal Sandra Mamani ingresaron con una orden de la juez Yensy Rojas.
En la requisa, se secuestraron celulares, equipos de computación, fotografías, prendas de vestir y otras pruebas relacionadas con el caso.
El pasado jueves, el director departamental de la Fuerza Especial de Lucha el Contra el Crimen (Felcc), Iván Zambrana, informó que el sacerdote de la parroquia de Pompeya fue aprehendido en el marco de una investigación por corrupción de niños y acoso sexual.
Ese allanamiento se respaldó en una orden de la jueza Yensy Rojas.
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