El cardenal se encuentra en plena recuperación, luego que le fuera colocada exitosamente una bomba de insulina de última tecnología, en horas de la mañana. El equipo médico que realizó la intervención es el liderado por el Dr. Douglas Villarroel, del Centro de Tratamiento de Diabetes de la clínica Incor.
El Cardenal fue intervenido en 1992 cuando se le detectó una insuficiencia coronaria, actualmente, como es de conocimiento público, adolece de diabetes, enfermedad que lo obligaba a someterse cinco o seis veces diarias a la colocación de insulina.
Este tratamiento, ahora se reducirá a la regulación de esta bomba de insulina, implemento más moderno del mundo en medicina, hoy colocado al pastor de la Iglesia boliviana, por el renombrado médico cruceño, Douglas Villarroel, confirmó Erwin Bazán responsable de comunicación y vocero de la Arquidiócesis de Santa Cruz.
El dispositivo
La bomba que se le colocó al cardenal segrega insulina de manera basal las 24 horas del día, pero este tratamiento debe ser reforzado con bolos de insulina cada vez que se coma, de acuerdo con la cantidad de alimento que se vaya a ingerir.
El dispositivo imita con bastante éxito la función del páncreas sano, liberando automáticamente pequeñas cantidades de insulina de acción rápida, en décimas o centésimas de unidad, cada pocos minutos.
Aporta una mayor autonomía a la persona con diabetes, puesto que no debe estar sujeto a los estrictos horarios a los que se somete con las insulinas cotidianas. Según estudios científicos disminuye hasta en un 70% el riesgo de hipoglucemias.
La evolución del cardenal ha sido positiva y actualmente se encuentra recuperándose con éxito, informó Bazán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario