El libro Estoy en manos de Dios. Apuntes personales entre 1962-2003, que recoge notas privadas de Juan Pablo II salvadas por su secretario de la quema, debutó ayer en las librerías de Polonia entre críticas de fieles que lamentan que salgan a la luz escritos que el papa nunca quiso publicar. La obra recopila las experiencias espirituales del pontífice polaco, junto a oraciones, reflexiones y comentarios.
Fue el cardenal polaco Stanislaw Dziwisz, secretario personal de Karol Wojtyla durante más de 40 años, quien salvó esas cuartillas de ser quemadas, a pesar de que este había sido el deseo expreso de Juan Pablo II antes de su muerte. En el libro, el expontífice critica a algunos prelados que trabajaban con él
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