lunes, 7 de mayo de 2012

Cada año menos soldados quieren servir en la Guardia Suiza del Vaticano

Jurando “servir fielmente” al Papa y dedicarse “con todas sus fuerzas” a su defensa, “sacrificando si hay que hacerlo, incluso la vida”, 26 jóvenes han entrado a formar parte este domingo en la Guardia Suiza Pontificia.

Un rito -el del juramento de los reclutas- que se repite cada 6 de mayo, día en el que se conmemora la heroica muerte de 147 soldados helvéticos caídos en 1527 en una batalla por la defensa de Clemente VII, durante el saqueo de Roma.

Sin embargo, en el acto de este año, el Ejército más pequeño del mundo, ha aprovechado la ocasión para señalar que cada vez hay menos jóvenes que se dedican a este servicio: el año pasado fueron 34 los nuevos reclutas. “Prestamos, como hombres libres, un servicio voluntario a la Santa Iglesia, por la cual cada vez menos gente de nuestra patria se compromete”, asegura el coronel Daniel Rudlf Anrig, comandante del cuerpo.

“Para servir al Sumo Pontífice son necesarios, por una parte, la convicción de que prestar un servicio no equivale a trabajar y por otra, tener la mentalidad de la dedicación”.

Para ir al encuentro de los más jóvenes y para superar la dificultad del reclutamiento entre otros, la disciplinada unidad de la Guardia Suiza acaba de inaugurar una página de Facebook.

De los 26 reclutas - todos hombres- 16 son alemanes, cinco franceses y cinco italianos. Después de la lectura de la solemne promesa de servir al Papa, cada soldado ha apoyado su mano izquierda sobre la bandera de la Guardia y ha alzado los tres dedos abiertos, símbolo de la Trinidad, jurando en su lengua madre: “juro observar fielmente, lealmente y honorablemente todo lo que me ha sido dicho. Que Dios y sus santos me ayuden”.

1 comentario:

  1. Pienso como catolico-universal que deberia haber postulantes de las Americas para la guardia pontificia, muchos estarian muy honrrados de servir a la iglesia de esta manera. Habemos mas gente joven en las Americas que en unos cuantos paises Europeos solamente. Gracias y mil bendiciones desde Bolivia.

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